TRAS LAS HUELLAS DE LA SEGURIDAD: LA LABOR INCANSABLE DE SAMUEL LUNA

Reportaje

Por: Lucero Nayeli Paredes Cornejo

En la Universidad Nacional de San Agustín (UNSA) la seguridad es un aspecto crucial que a menudo se subestima. Samuel Luna, efectivo del Cuerpo de Bomberos con 37 años de experiencia, asume el papel de promotor de la cultura de seguridad en la Escuela Profesional de Relaciones Industriales. Su labor va más allá de su cargo como servidor administrativo, es un compromiso que abarca la capacitación de alumnos, brigadistas y personal en simulacros y situaciones de emergencia.

Desde agosto del año pasado, Luna trabaja incansablemente para organizar simulacros en la universidad, no solo en Relaciones Industriales sino también en otras facultades y escuelas profesionales que requieran su ayuda. Su presencia y disposición son fundamentales para inculcar nociones básicas de seguridad en un entorno donde la conciencia aún está en desarrollo.

La importancia de estos simulacros radica en la preparación y concientización de la comunidad universitaria ante posibles emergencias. Luna destaca que la Ley 29783 establece la necesidad de contar con brigadas permanentes de emergencia, algo que logró implementar con éxito en varios sectores de la UNSA. Estos grupos compuestos por alumnos y personal, están capacitados para actuar en situaciones críticas, desde el uso de extintores hasta la atención inmediata de emergencias médicas.

Gracias a su larga trayectoria en el Cuerpo de Bomberos, Samuel Luna se siente más comprometido con la Universidad, él trata de concientizar y trasladar la cultura de prevención a toda la comunidad agustina. Su enfoque se basa en la necesidad de abordar el tema con seriedad, ya que a través del compromiso y la colaboración de todos se logran resultados efectivos en materia de seguridad laboral, que no es responsabilidad de una sola persona sino de todos.

Luna Huamaní representa un pilar fundamental para la seguridad de la comunidad agustina, su labor es un gran ejemplo de acción y liderazgo que también implica educar y concientizar sobre la importancia de la prevención de riesgos laborales, asegurando que la normativa se cumpla y se garanticen las condiciones seguras.

Todo parte desde la normativa: Ley 29783

La Ley N° 29783 establece en su artículo 33 la obligación de mantener registros del Sistema de Gestión de Seguridad y Salud, incluyendo inducción, capacitación, entrenamiento y simulacros de emergencia. Además, el artículo 42 destaca las funciones del Comité de Seguridad y Salud en el Trabajo, entre las que se encuentra la promoción del compromiso, la colaboración y la participación activa de todos los trabajadores en la prevención de riesgos laborales.

Para Samuel Luna esta normativa no es solo un conjunto de reglas a seguir, sino una guía para motivar a los demás a tomar en serio la prevención de riesgos, fomentando la comunicación eficaz, la participación en la solución de problemas de seguridad, la inducción, la capacitación, los simulacros y otras actividades que fortalezcan el compromiso de toda la comunidad agustina.

En el entorno educativo y laboral de la UNSA es fundamental garantizar condiciones que protejan la vida, la salud y el bienestar de todos, esto implica considerar factores sociales, laborales y biológicos, diferenciados según el género para evaluar y prevenir los riesgos en la salud laboral.

La Ley de Seguridad y Salud en el Trabajo en Perú busca promover una cultura de prevención de riesgos laborales en todo el país, para lograrlo, establece el deber de prevención de los empleadores, el rol de fiscalización, control del Estado, y la participación activa de los trabajadores y sus organizaciones sindicales.

Prevención de riesgos: Simulacros de emergencia

Los simulacros de emergencia son prácticas que involucran a todo el personal de una entidad y, en muchos casos, también a externos como los bomberos, defensa civil, policía y personal médico, así lo establecen los manuales de prevención de riesgos laborales. Por esta razón, se requiere una preparación meticulosa y realizar simulacros de manera oportuna, que nos permitan obtener resultados y conclusiones relevantes para mejorar el plan de emergencia existente.

Samuel Luna desempeña una labor social destacable al priorizar la realización de simulacros, ya que permite a la comunidad agustina verificar de manera real la adecuación del plan a las necesidades existentes, además, sirve para introducir mejoras tanto en los procedimientos establecidos como en los medios e instalaciones, ya que se suelen descubrir detalles que se han pasado por alto únicamente cuando se pone a prueba la capacidad de respuesta ante una emergencia.

La realización periódica de simulacros, al menos una vez al año, tiene como objetivo activar el plan de emergencia o de autoprotección sin previo aviso y en cualquier momento del día, esto fomenta una participación eficiente de todos los grupos implicados, creando hábitos de respuesta organizada y operativa a través del entrenamiento práctico.

Entonces ¿cuál es la labor de defensa civil?

En la UNSA se llevan a cabo diversas acciones con el objetivo de garantizar la seguridad y preparación ante posibles emergencias o desastres. Entre las medidas implementadas se destaca la elaboración de un Plan Familiar de Emergencias para la comunidad agustina, que busca promover la organización y la respuesta planificada ante situaciones críticas, además se establece estrecha coordinación con entidades como la Municipalidad Provincial de Arequipa y la Subgerencia de Gestión de Riesgos de Desastres, con el fin de articular esfuerzos para la respuesta efectiva ante desastres, priorizando la protección de la vida y el patrimonio de las personas afectadas.

Defensa civil tiene el deber de enfatizar en la rehabilitación como parte integral de sus acciones, abarcando la restauración de servicios básicos e infraestructura, así como la recuperación de medios de vida tras la ocurrencia de un evento adverso.

Entre las acciones concretas que se llevan a cabo se incluyen la inspección de edificaciones para identificar posibles riesgos, el asesoramiento para obtener certificados de seguridad, la capacitación del personal en temas de Defensa Civil, la identificación de peligros y la coordinación para la realización de simulacros de sismos y tsunamis. Estas iniciativas reflejan el compromiso de la casa agustina en promover la cultura de la prevención y la preparación ante situaciones de emergencia, con el objetivo de salvaguardar la integridad y bienestar de su comunidad universitaria.

Desafíos por superar en la seguridad universitaria

Samuel Luna, con su experiencia y conocimientos en seguridad, identifica varios desafíos clave que la UNSA enfrenta en materia de seguridad y prevención de riesgos laborales, uno de los principales es la falta de tiempo y recursos, que dificulta la participación de la comunidad universitaria en los simulacros y compromete su efectividad. Esta limitación también se refleja en la capacidad del área de defensa civil de la universidad para capacitar adecuadamente al personal en temas de seguridad.

Para abordar estos desafíos, Luna propone medidas concretas. En primer lugar, sugiere que el área de defensa civil de la universidad cuente con personal capacitado de forma permanente, que se dedique exclusivamente a organizar simulacros y capacitar al resto de la comunidad universitaria. Esta medida garantizaría que la seguridad sea una prioridad constante y que se puedan implementar prácticas efectivas de prevención de riesgos.

Además, enfatiza la importancia de contar con brigadas permanentes de emergencia para cada turno y área de la universidad, estas brigadas serían responsables de enseñar a la comunidad universitaria cómo actuar en situaciones de emergencia, como incendios o terremotos, y capacitar sobre el uso adecuado de los equipos de seguridad, como extintores.

Esta visión resalta que la aplicación efectiva de estas normativas depende la voluntad y compromiso de todos los involucrados. La falta de recursos y tiempo se convierte en un obstáculo significativo, pero también en una llamada a la acción para encontrar soluciones creativas y prácticas que mejoren la seguridad de la comunidad universitaria.

No cabe dudas que la dedicación de Samuel en la promoción de la cultura de seguridad es un ejemplo para todos, demostrando que “querer es poder” y mejor aún si estos actos parten del corazón.