lunes, 17 de junio de 2024

LA SOMBRÍA ESCALA DE FEMINICIDIOS EN AREQUIPA DURANTE EL 2024

Crónica
Por: Lucero Nayeli Paredes Cornejo

En pleno 2024 el Perú se enfrenta a una sombría realidad: La violencia contra la mujer no solo persiste, sino que se incrementa de forma alarmante. El 2023 cerró con 170 feminicidios reportados, una cifra que representa un aumento del 31% en comparación con los casos del 2022; sin embargo, el panorama se torna aún más oscuro cuando se observa la tendencia en los primeros meses de este año.

Entre enero y abril de 2024, se registraron 66 feminicidios en el Perú, marcando un incremento del 130% respecto al mismo periodo del año anterior. En marzo se documentaron 10 casos y en abril el número ascendió a 23. Estas cifras revelan una escalada preocupante en la frecuencia de estos actos atroces. Según el Programa Nacional Aurora, en 2023 se registró una víctima de feminicidio cada cinco días. Este año, ese intervalo parece acortarse, reflejando una realidad angustiante.

El primer caso de feminicidio del 2024 fue un estremecedor recordatorio de la vulnerabilidad que enfrentan muchas mujeres en el país. El 17 de enero, se halló el cuerpo de Nora Caraza Accahuaqui, una joven de 23 años, dentro de una refrigeradora en su vivienda en el sector de Peruarbo, en Cerro Colorado. La familia de Nora comenzó a buscarla desesperadamente desde el sábado 20, cuando dejó de responder a sus llamadas y mensajes.

Fue una de sus primas quien preocupada por la falta de noticias, decidió ir al inmueble que Nora alquilaba, al llegar, encontró la puerta de la refrigeradora amarrada con una soga. La prima, temiendo lo peor, desató la cuerda y abrió la puerta, descubriendo el cuerpo de Nora en su interior. La Policía Nacional del Perú confirmó que se trataba del primer caso de feminicidio del año.
Apenas iniciado febrero, Arequipa lamentó la pérdida de otra víctima. Mariluz Sucasaire Cañazaca, una comerciante de Majes, se convirtió en la segunda mujer que perdió a manos de su pareja. Con tan solo 25 años dejó en la orfandad a una hija de cinco años y a una comunidad consternada por la brutalidad de su muerte. Era una emprendedora conocida en su distrito, con un puesto de productos de plástico frente al mercado metropolitano de Majes, su negocio “Casa Bonita” no solo era su fuente de ingresos sino también un reflejo de su esfuerzo y dedicación. El 1 de febrero, lo que debía ser un día más de trabajo se convirtió en su último día de vida.

A las 4 de la tarde, Jafhet Tuni Pacco, expareja de Mariluz y padre de su hija, llegó desde Juliaca para reunirse con ella. Lo que comenzó como una visita terminó en tragedia. Después de la reunión, Jafhet abandonó la tienda y, poco después, las amigas y colegas de Mariluz encontraron su cuerpo sin vida, apuñalado por su ex conviviente.

El tercer feminicidio estuvo marcado por el asesinato de una adolescente. La mañana del lunes 12 de febrero comenzó con un macabro hallazgo, agricultores de la zona reportaron a la comisaría de Pampa de Camarones el descubrimiento de un cuerpo sin vida en una acequia auxiliar, a 15 metros del canal principal. La joven yacía boca abajo, víctima de estrangulamiento, según determinaron los peritos que acudieron al lugar. Un equipo de detectives de Homicidios de la Divincri y la fiscal de turno de Hunter se trasladaron hasta los terrenos de cultivo para realizar el levantamiento del cuerpo que fue trasladado a la morgue central de Arequipa. Allí, se estableció que la adolescente murió entre las 2 y 3 de la madrugada, aunque no pudo ser identificada de inmediato.

Este año sigue dejando una estela de dolor y violencia en Arequipa, con el cuarto feminicidio del año registrado el 3 de abril en el asentamiento humano Villa Don Jorge, en la provincia de Camaná. Ruth Nilda Yallerco, una joven de 26 años fue brutalmente asesinada por su pareja, Melanio Apaza, de 28 años, quien luego se quitó la vida con el arma blanca utilizada para el ataque. Este trágico incidente se desencadenó en el negocio de comida que Ruth Nilda atendía. Preocupado por no tener noticias de su hermana durante varias horas, su hermano decidió buscarla, al ingresar al negocio, que también funcionaba como dormitorio, encontró los cuerpos sin vida de Ruth y Melanio.

Mayo, mes de mamá, no quedará en el olvido para todos los arequipeños, cuando muchos se disponían a celebrar a su ser querido, un nuevo feminicidio resonó en la ciudad. Elena Ollachica García, de 60 años, fue apuñalada mortalmente por su pareja José Choquehuanca Choque, de 50 años, en su vivienda ubicada en la Asociación Caminero Empleado, en Yura. Según las investigaciones preliminares, la Policía sospecha que la pareja discutió en la vivienda por reclamos del agricultor, en medio de la confrontación, José Choquehuanca atacó a Elena con un arma blanca, después del ataque, él intentó quitarse la vida con el mismo cuchillo. La hija de la pareja, al llegar al lugar encontró a ambos en el suelo cubiertos de sangre, a pesar de los esfuerzos por salvarla, Elena falleció en la sala de urgencias del hospital Honorio Delgado.

El impacto de estos hechos en la comunidad y la región es profundo. Nora, Mariluz, Ruth Nilda, Elena Ollachica y la joven adolescente, no deben quedarse como una cifra más en un cuadro estadístico de violencia de género, eran madres, hermanas o hijas que confiaron en aquel que les prometió cuidarlas y al final termino por convertirse en sus verdugos.

Cada feminicidio es un recordatorio doloroso de que las mujeres en Perú aún enfrentan riesgos significativos simplemente por su género. Es un llamado a la acción para toda la sociedad, para que juntos construyamos un país donde la igualdad, el respeto y la seguridad sean garantizados para todos, y donde ninguna mujer tenga que vivir con miedo a ser violentada o asesinada.

No hay comentarios:

Publicar un comentario