CRÓNICA
Escribe: Grover Lanza
Desde el inicio del primer set, la USMP mostró su intención de dominar el encuentro. Allison Alarcón, con un potente saque, dio inicio a la contienda. Sin embargo, fue Kiara Montes de la USIL hizo el primer punto, marcando el tono de una final que prometía ser reñida. Flavia Montes, destacada jugadora de la USMP, no tardó en igualar el marcador, demostrando que el equipo estaba listo para competir.
La USMP, liderada por Montes, logró establecer una ventaja inicial de 5 a 3 gracias a una organización defensiva sólida y ataques certeros. La presión aumentó cuando la USMP se distanció a 7 a 4, mostrando su control en el juego. Pero la USIL, con una gran capacidad de respuesta, comenzó a cerrar la brecha, y el marcador se mantenía apretado.
A medida que el set avanzaba, la USMP se mostró firme en ataque, alcanzando los 16 puntos. Flavia Montes destacó con bloqueos y remates, siendo crucial para mantener la ventaja. La USIL, sin embargo, no se rendía. Con el esfuerzo de Fátima Villafuerte y Corayma Gómez, la USIL comenzó a remontar, acercándose a 12 puntos, aunque aún con una diferencia considerable.
El final del primer set fue un espectáculo de talento. La USMP, impulsada por la energía de sus jugadoras, logró cerrar el set con un contundente 25 a 19. Flavia Montes fue la gran figura, aportando puntos clave que llevaron a su equipo a tomar la delantera en el encuentro.
El segundo set comenzó con una USIL decidida a revertir la situación. Kiara Montes anotó el primer punto, y rápidamente, la USIL tomó una ventaja de 3 a 1. La USMP, sin embargo, respondió con coraje, con Alarcón y Barbosa descontando y manteniendo la lucha por la corona.
A medida que el set avanzaba, la USIL se mostró más agresiva, alcanzando un sorprendente 20 a 13. La presión sobre la USMP era palpable, y las jugadoras de la USIL, con un juego más coordinado y efectivo, comenzaron a hacer valer su juego. Corayma Gómez también se destacó, sumando puntos importantes que llevaron a la USIL a un 25 a 19 en este set, igualando el partido y llevando la final a un tercer y decisivo set.
El tercer set fue un verdadero espectáculo lleno de emociones. La USMP comenzó ganando con un remate efectivo, pero la USIL, impulsada por la energía de su afición, empató rápidamente. Cada punto se disputaba con una intensidad propia de una final, y el marcador reflejaba un emocionante tira y afloja.
Con el partido empatado a 11, ambos equipos lucharon con todas sus fuerzas. La USMP, con Flavia Montes a la cabeza, tomó la delantera nuevamente, pero la USIL, con Kiara Montes y Corayma Gómez, no se dio por vencida. Con un espíritu de lucha admirable, ambas jugadoras se mostraron claves en esta batalla.
El juego se intensificó aún más. La USIL, mostrando su carácter y determinación, logró igualar el marcador a 15, desatando la euforia de sus seguidores. El ambiente en el coliseo era eléctrico, y la presión aumentaba con cada jugada. La USMP intentó mantener su ventaja, pero la USIL siguió presionando, y la tensión se veía en los rostros de las jugadoras y el público.
Finalmente, en un momento culminante, Corayma Gómez y Fátima Villafuerte se combinaron para llevar a la USIL al punto 17, marcando un giro decisivo en el partido. La remontada estaba en marcha, y la USIL se hacía con el oro. El coliseo y los suyos estallaron en alegría mientras las jugadoras celebraban.
La USIL selló su victoria con un impresionante 2 a 1. La alegría desbordante de las jugadoras se tradujo en abrazos y lágrimas de felicidad, rodeadas por el un público que aplaudió la entrega y el esfuerzo de ambas escuadras.
El Coliseo Francisco Bolognesi fue testigo de esta gran batalla, cada remate, cada bloqueo y cada punto se convirtieron en parte de una narrativa emocionante que quedará grabada en la memoria de todos los asistentes. La USMP, aunque no se llevó el oro, demostró un nivel de juego excepcional y una lucha digna de admirar.
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