Informe
Por: Nayely Kassandra Luque Yanqui
En el distrito de Tiabaya, ubicado en la provincia de Arequipa, una tradición arraigada desde la época colonial continúa cautivando a sus habitantes y visitantes de toda la región. La "Bajada de Reyes y sacudida de perales" es una festividad en la que se fusiona lo religioso, tradición agrícola y gastronomía típica, marcando el calendario de la localidad cada 6 de enero, día de la bajada de Reyes Magos.
Desde tiempos remotos, familias arequipeñas y de alrededores se congregaban para participar en la misa, buscaban la bendición del Niño Jesús y acompañaban a los Reyes Magos en su recorrido por las calles del distrito, culminando en la zona de “El Balcón”, donde un nacimiento vivo esperaba la llegada de los Magos y la sacudida de los perales.
La festividad hoy en día, no se limita a lo religioso, después de la misa, la multitud se dirige hacia los perales, donde agricultores y autoridades locales se preparan para la emblemática "sacudida de perales". Este ritual implica agitar los árboles cargados de jugosas peras, una tradición que, aunque se mantiene de generación en generación, enfrenta desafíos significativos.
DESAFÍOS PARA LA TRADICIÓN
Los perales que una vez abundaron en Tiabaya y abastecían los mercados locales con sus frutos están desapareciendo. Esta disminución amenaza con alterar la esencia misma de la celebración tradicional. Para contrarrestar esta tendencia, las autoridades locales han proporcionado plantones a los agricultores para revitalizar los huertos de peras.
Cabe destacar que la preservación y continuidad de esta tradición comenzó después del gran terremoto del 2001, que azotó la ciudad.
“Era una costumbre muy importante, como ahora es el Festival de la Cerveza Arequipeña. Esa misma connotación tenía la sacudida de peras en Tiabaya. Hay textos que nos describen cómo personas de diferentes lugares llegaban a Tiabaya por las peras", indicó Samuel Mamani Ylaquita, promotor cultural de Tiabaya.
Las peras eran consideradas una fruta preciada en dicho distrito, protegiéndolas diligentemente de plagas de roedores que amenazaban con dañar los árboles frutales. Por esta razón, muchos agricultores optaban por cubrir las plantas con latas para evitar que los roedores estropearan los frutos que serían comercializados el 6 de enero.
“A fines de la década de los 60, comenzó la época de la cebolla, los agricultores tenían que poseer terrenos extensos para sembrar esta verdura, entonces los perales pasaron a segundo plano, más se ganaba produciendo cebolla que peras, ahí se da la reducción masiva de todos los huertos de perales”.
Para Wilder Robles, habitante de Tiabaya, la sacudida de peras era parte de la identidad de la comunidad, pues personas de diferentes lugares venían a disfrutar de esta costumbre. "Decías, quiero este peral, pagabas y te sacabas las peras. Los niños se subían y movían los perales, algunos traían su comida y pasaban el día de campo, eran un boom en ese entonces", comentó.
CONSERVACIÓN LOS PERALES EN TIABAYA
Kimberling Pilar Zapana Ibárcena, regidora del distrito de Tiabaya, señaló que la municipalidad desde el 2013 implementó medidas de protección para los perales en conjunto con la minera Cerro Verde para recolectar plantones que fueron entregados a los agricultores para asegurar la continuidad de esta tradición y mantener viva la sacudida de perales.
Por su parte el promotor cultural, Samuel Mamani. acotó que durante la segunda administración del ex alcalde, Miguel Ángel Cuadros Paredes, se entregaron más de 4000 plantones de pera. Sin embargo, no se cuenta con un registro del porcentaje de supervivencia de estas plantas, aunque se presume que muchas de ellas no lograron mantenerse, dado que la cantidad de perales sigue siendo reducida.
Esta tradición estuvo al borde de la extinción debido a la falta de atención por parte de gestiones anteriores. Por ende para preservarla, las autoridades municipales han comenzado a comprar peras con el fin de continuar con esta costumbre.
Los perales no solo son utilizados para esta tradición, también se ofrece un banquete de sabores típicos como la "timpusca" o el "chaque peras", preparada con carne de cordero, chalona, papas, trigo y otros ingredientes autóctonos.
En la actual gestión del alcalde Godofredo Delgado Dueñas se llevó a cabo la celebración del festival de la Timpusca de peras, un plato tradicional de Tiabaya. Es importante considerar que los ciudadanos son los principales agentes de conservación de esta tradición. Por tanto, pueden asistir a charlas ofrecidas por la municipalidad distrital semanas antes y después del 6 de enero para conocer la importancia de los perales.
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