La Oficina Nacional de Procesos Electorales (ONPE) y la Organización de las Naciones Unidas para la igualdad de género y el empoderamiento de las mujeres (ONU Mujeres) coincidieron en la necesidad de ir más allá de la cuota de género para superar el déficit de participación de la mujer en cargos de elección popular, que se acentúa particularmente a nivel de los gobiernos locales.
Irune Aguirrezabal, Asesora Regional de ONU Mujeres para las Américas y el Caribe, señaló que ese déficit que se observa en esa materia en el Perú es uno de los más bajos de toda la región, particularmente en lo que respecta a las mujeres que ejercen el cargo de alcaldesas, como evidencian los resultados de las elecciones municipales de las últimas décadas.
“En los últimos 33 años, no se ha superado el 3.8% de representación de mujeres electas en las alcaldías distritales”, manifestó en la sede de ONPE, durante su participación en el conversatorio “Democracia Paritaria, Alternancia y Reforma Electoral”.
Consideró que esta exigua presencia de la mujer en ese y otros cargos de representación política evidencia la necesidad de avanzar hacia una democracia paritaria que permita asegurar no solo la equidad en la participación política, sino también la igualdad en otros ámbitos como el económico, social y cultural.
La especialista valoró que la ciudadanía sea ahora más consciente de la inequidad en las condiciones de participación política de la mujer, y abogó para que en el caso peruano también se apruebe un mecanismo que posibilite revertir esa situación.
Mencionó, en esa línea, que la paridad de género ya se aplica en Ecuador, México, Costa Rica, Bolivia, Honduras y Paraguay y que su extensión en Panamá, Guatemala y Uruguay se encuentra en pleno estudio.
Durante el conversatorio, el gerente general de la ONPE, Gilbert Vallejos, indicó que los organismos electorales respaldan la propuesta de alternancia de género en las listas de candidatos a cargos de elección popular hasta cubrir la cuota, por ser un mecanismo para promover la participación política de las mujeres, y presentaron una iniciativa en ese sentido para evitar que la cuota de género del 30% sea cumplida solo como una formalidad.
Señaló que esa iniciativa forma parte de una reforma más amplia, que busca institucionalizar los mecanismos de democracia interna, estableciendo que las elecciones internas se realicen en un solo día, con participación obligatoria de los entes electorales y con el voto de todos los afiliados.
“Estamos comprometidos con la alternación de género y creemos que debe ser discutida y aprobada por el Congreso, junto a la reforma de democracia interna”, puntualizó.
Por su parte, María Liberato Tucto, del Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables, destacó que otra alternativa para superar las limitaciones de la cuota de género es estableciendo la paridad. Añadió también que desde el Poder Ejecutivo se apoya la aprobación de una ley contra el acoso político.
Expuso que las inequidades de género se mantienen vigentes en la participación política, lo que constituye un problema central de las democracias modernas.
La responsable del Programa de Participación Política y Ciudadanía del Movimiento Manuela Ramos, Lisbeth Guillén Chávez, dijo que en la agenda para garantizar los derechos políticos de las mujeres debe figurar las elecciones internas en los partidos políticos con intervención de la ONPE y con resultados vinculantes.
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