Por: David Flores
Comerciantes de la calle Dean Valdivia expresaron su descontento por la reciente disposición de la Municipalidad Provincial de Arequipa, que habilitó un espacio frente a sus locales para estacionar vehículos siniestrados por la policía. Según los vendedores, esta medida ha provocado una caída del 30% en sus ventas. La zona, que anteriormente estaba destinada a ser una zona azul durante la gestión del exalcalde Alfredo Zegarra, fue modificada sin previo aviso, lo que ha generado inconformidad entre los afectados.
Baltazar Zeballos, comerciante y dueño de la piñatería Gasparín, explicó que entre 80 y 85 vendedores se han visto perjudicados por la medida. "Está reducido el negocio un 30%. Nos han bajado bastante", señaló Zeballos, quien añadió que algunos comerciantes, como él, alquilan los puestos y que la disminución de ventas es considerable. También expresó su intención de tomar acciones legales. "Hay que ir ya con un abogado a hacer un escrito, esto es abuso de autoridad", indicó, refiriéndose a la modificación de la zona azul, que, según él, no fue respetada por la actual administración municipal
Baltazar Zeballos, comerciante y dueño de la piñatería Gasparín, explicó que entre 80 y 85 vendedores se han visto perjudicados por la medida. "Está reducido el negocio un 30%. Nos han bajado bastante", señaló Zeballos, quien añadió que algunos comerciantes, como él, alquilan los puestos y que la disminución de ventas es considerable. También expresó su intención de tomar acciones legales. "Hay que ir ya con un abogado a hacer un escrito, esto es abuso de autoridad", indicó, refiriéndose a la modificación de la zona azul, que, según él, no fue respetada por la actual administración municipal
Zeballos también desmintió las declaraciones del Gerente de Transportes, quien había asegurado que los mismos comerciantes dejaban sus vehículos estacionados todo el día en la zona. "Yo le voy a contradecir, que me demuestre qué carro tiene acá, qué dueño de tienda tiene el carro cuadrado", retó Zeballos. Agregó que él mismo paga por el estacionamiento de su vehículo en otro sector de la ciudad, y que la acusación es falsa.
Con estos cuestionamientos, los comerciantes exigen una reconsideración de la medida tomada por la municipalidad, ya que consideran que afecta gravemente la actividad económica en la zona.
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