domingo, 6 de octubre de 2024

NATHALY RODRÍGUEZ, FUTBOL A LA TRUJILLANA

ENTREVISTA

Por: Guillermo Miranda Choque

Reconociéndose como una persona de desafíos, Nathaly Rodríguez vino de Trujillo para demostrar que la altura de Arequipa era uno más para su racha de retos, junto al mero hecho de jugar el fútbol y estudiar actualmente Derecho en la Universidad Nacional Mayor de San Marcos (UNMSM), casa a la que viene representando durante los Juegos Universitarios que se celebran este 2024 en las tierras del volcán Misti.

¿Cómo empezó tu relación con el fútbol?

Yo siempre he practicado natación y voley. Entonces en la primaria, un día estaba con una amiga y le dije: “ya me aburrí del voley, hay que jugar con los chicos”. Y nos metimos en sexto de primaria a jugar. Incluso tengo una cicatriz cerca del labio, porque no sabíamos jugar, nos metíamos como sea, tenía trece años aproximadamente. Y ahí me despertó el bichito. Dejar el voley, la natación y dedicarme a algo que no era buena. Me encantan los desafíos y definitivamente el fútbol fue uno de esos. 

Yo en Trujillo pensé que era la única chica que jugaba fútbol, no encontraba a nadie más, al menos por las calles, por ahí cerca al barrio. Sin embargo, una vez en un parque, una chica me vio y me dijo, “me gusta cómo juegas, ¿qué te parece si vas a un equipo de chicas?”. Ahí fue cuando empecé con el tema del fútbol como tal. 

¿Cómo fue tu crecimiento deportivo a partir de ese momento?

Fui a un equipo de Copa Perú, tenía 14 años, jugaba minutos todavía, no jugaba bien aún. Sin embargo, a partir de esa conexión, recibí una beca del Colegio Champagnat y ahí conocí a chicas que jugaban muy bien. Jugué incluso con chicas de Ricardo Palma y la UPAO (Universidad Privada Antenor Orrego). Conocí a muchas que actualmente están jugando en la Universiada. Todas crecimos, somos una misma promo. 

¿Qué sucedió cuando decidiste postular a la carrera profesional de Derecho?

Yo pensé que en la universidad me iba a olvidar del deporte. En el 2019 yo termino secundaria, en el 2020 vino la pandemia, yo estaba preparándome para ingresar a la Universidad Nacional de Trujillo (UNT). En la primera parte de la pandemia, no salíamos y no estaba preparándome como tal, y en la segunda parte, a partir de agosto en adelante, empecé a estudiar en las mañanas y a entrenar en las tardes, pero para el examen de admisión no fue suficiente. 

Me acuerdo que no ingresé y después de eso dije: “tengo que dejar el deporte a un lado por lo menos”, así que dos meses me metí a estudiar mañana, tarde y noche con tal de ingresar, y así fue que ingresé a la nacional de Trujillo, a partir del año 2021.

¿Cómo te perfilas en algunos años respecto a tu perspectiva profesional?

Actualmente me gustaría dedicarme al derecho comercial, que no es una rama muy conocida por así decirlo. Se trata acerca de los procedimientos para que tanto Perú haga exportaciones y también reciba importaciones en Aduanas, actualmente en el puerto de Chancay, que va a ser el megapuerto. Y muy aparte, al momento que uno es abogado también puede litigar, lo más típico es demanda por alimentos, muchas madres desconocen eso, no conocen que pueden demandar, que pueden obligar a la otra persona a brindar un apoyo económico.

¿Contemplas unas visión a futuro en el ámbito deportivo?

Actualmente creo que lo primordial es terminar mi carrera. Per acompañado de eso, la Universidad Nacional de Trujillo está ofreciendo maestrías ya que la universidad ha sacado equipo de liga para copa Perú, así que definitivamente quiero seguir jugando,  agarrando una maestría de repente, e incluso existe lo que son los campeonatos intercolegios profesionales, y derecho está muy bien ubicado, a instancias nacionales, así que por ahí me veo en unos años. 

¿Cuáles son los desafíos para el fomento del fútbol femenino en el Perú?

Uno de los principales problemas es que las chicas dejan de jugar porque no lo ven como algo profesional. Algunas instituciones buscan que jueguen, sin embargo hay personas que ya están con su bachiller y tienen definitivamente que trabajar. Pero también si el gobierno, o la institución, no les da la posibilidad de apoyar, incluso con pasajes, nunca se va a llegar más lejos de lo que se está. 

Definitivamente el apoyo es crucial para que el deporte siga avanzando, y más que todo para que las chicas lo sigan ejerciendo al término de su vida universitaria. Son muy pocas quienes alcanzan el nivel profesional y viven del deporte, pese a que la mayoría son jovencitas.

¿Cómo puedes sobrellevar tu actividad deportiva y tu vida universitaria durante este intercambio?

Definitivamente las notas son lo que más me preocupa, porque cada ciclo es anual en la carrera de derecho de San Marcos, así que yo debería haber jugado hasta agosto e irme a Trujillo, pero estaré hasta finales de este año. Felizmente de mi promoción vinieron dos amigos, entrenamos todos los días de seis a ocho de la mañana. Algunas veces ingreso a clases a las ocho y media, otras a las ocho, tengo que estar corriendo dentro de la universidad, termino cansada. En las tardes tengo también clases, junto a los trabajos, así que ha sido todo un desafío.

¿Cuál es la motivación que hallas para hacer todas tus actividades? 

Yo creo que a muchas personas el deporte les puede salvar de algún problema, lo vi por ese lado, en algún momento sentí que no tenía apoyo, así que el deporte fue un refugio. Y esa motivación de tener algo de qué agarrarme, hizo que todos los días en la mañana me hiciera decir “tengo que entrenar, tengo que ser disciplinada, si no soy disciplinada en el deporte tampoco lo voy a ser en mi vida personal”.

Yo creo que con la disciplina se puede lograr más de lo que el talento puede, si una persona es talentosa y no disciplinada con su entrenamiento, descanso y alimentación, no va a llegar a más de lo que una persona disciplinada puede dar. 


No hay comentarios:

Publicar un comentario