viernes, 31 de octubre de 2014

ALDEA INFANTIL SAGRADA FAMILIA CON NUEVOS Y SEGUROS AMBIENTES

Niños y adolescentes en estado de abandono físico y moral, albergados en la Aldea Infantil Sagrada Familia de Alto Cayma, ya estudian en moderna infraestructura implementada por la gestión del presidente regional, Juan Manuel Guillén Benavides, ejecutado por administración directa con una inversión de S/. 1'182,093.85 soles.

En el segundo nivel se construyó los dormitorios de adolescentes en un área de 190.52m2. También se instaló duchas de niños y niñas en un área de 236.30m2, se mejoró: la lavandería en 20.96m2, el patio de tendido, y los sectores dañados e inseguros del cerco perimétrico existente.


Asimismo, se hizo caminerías empedradas y veredas. Se colocó 26 pastorales y 6 reflectores ubicados sobre las vigas metálicas de la losa. Y para protegerlos del sol, se realizo trabajos de montaje de columnas y vigas metálicas, con colocación de malla rachell y tensores. Y en una extensión de 1287.94m2. Y se habilitó extensas áreas verdes y nuevos sardineles.

En la aldea también se implementó la sala de cómputo con equipos de cómputo, impresora, mesas para computadoras y sillas. La sala de tareas con mesas de trabajo, sillas, pizarra acrílica, y mueble de melanina. La sala de televisión con sillas, equipo de TV, equipo de DVD, mueble de melanina. Los dormitorios de los niños, niñas y adolescentes con camas, colchones, sábanas, frazadas, cubrecamas, almohadas, y muebles en melanina. Además, se adquirió una lavadora centrifugadora de 17 kg.

La aldea infantil Sagrada Familia funciona desde el año 2001 en el terreno ubicado en el distrito de Cayma, Av. Ramón Castilla 1408, Pueblo Joven, Francisco Bolognesi, en un área de 6,763.25 m2. Actualmente está a cargo del Arzobispado para su administración y dirección, atiende a un total de 44 albergados entre niños y niñas de 2 a 18 años, los cuales están distribuidos en 3 hogares: adolescentes, mujeres, adolescentes varones y niños-niñas con un prometió de 14 cada uno.

La aldea cumple con cubrir todas las necesidades básicas como la alimentación, educación, salud, vestidos y recreación con los ingresos de donaciones, convenios efectuados con diferentes instituciones.

Todos los albergados son hijos de padres que los abandonaron, madres solteras que no cuentan con los recursos económicos suficientes para mantener a sus hijos, es decir sufren de abandono moral y material por parte de sus familiares, como también existen casos de niños con discapacidad que sufrieron maltrato físico o abuso sexual, los cuales son derivados a la aldea por los diferentes juzgados de la región Arequipa.

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